LA FAMILIA MIRANDA
Published viernes, julio 28, 2006 by Jorge Enrique Díaz Pérez | E-mail this post
Hacemos todo a última hora, tenemos fama de ladrones y también de mirones, de morbosos. Gozamos con la desgracia ajena, con la sangre, con las tripas al aire y, como en el caso del suicida de Miraflores, con sacarnos fotos con el muertito. Amenábar, en su excelente
Tésis, ya lo insinuaba al inicio de la película ¿se acuerdan?
El Mercurio habló del tema con expertos. El doctor Luis Risco -subdirector de la clínica psiquiátrica de la U. de Chile- explica que
"hay un instinto del ser humano que es el de la curiosidad y que no es controlable. Hay zonas del cerebro destinadas a producir curiosidad y satisfacerla".
Con ejemplos como las fotos de
Hans Pozo o de las personas que murieron en una
explosión en un servicentro de Vitacura, imágenes que circularon a través del E-Mail, se comprueba lo que agrega el doctor Risco:
"Existe eso de sentirse especial en la medida en que tienes acceso a información que otros no tienen. Poder contar mi versión de haber estado ahí, me da cierto protagonismo social".
Serán síntomas de sociedad moderna, falta de pudor ¿qué? Por lo pronto, de la mañana para la tarde,
la galería de fotos de Las últimas Noticias (crédito de la foto que acompaña este post) estaba más suavecita. A primera hora
el finado lucía con lujo de detalles colgando del balcón. Se ve que el editor o alguien con más criterio, llamó para que corrigieran el error. Menos mal.