Escribo mientras aún suenan los bocinazos y uno que otro ceacheí en la calle. Chile, después de doce largos años de espera, clasificó de nuevo al Mundial y vaya cómo lo hizo.
Bielsa es uno de los protagonistas de esta hostoria linda. Claro, desde que llegó a nuestro país, el tipo dejó claro que lo suyo era trabajo serio y profesional. Confió en el material que tenía y así, a falta de una fecha para el cierre del minitorneo, estamos adentro con 30 puntos. Increíble, ¿no?
Otro tanto merece Harold. Un cambio del cielo a la tierra con respecto a su antecesor. Nuevamente, más allá de gustos, estilos y cosas así, el tipo ordenó la casa, avaló con su prestigio al fútbol chileno y aquí estamos. Clasificados al Mundial, esperando un amistoso contra Alemania y, seguro, una larga lista de pendientes.
No se me pueden olvidar los jugadores. Ojo que esta es una selección joven, da para Brasil 2014 fácilmente y vienen de un par de Mundiales atrás también (Holanda 2005 y Canadá 2007). Ok, a mí como periodista no me gusta mucho su reticencia a las entrevistas y todo eso, pero qué más da si los tipos juegan como juegan y hacen los goles que hacen. Estamos frente a una generación de jugadores extraordinariamente hábiles, a los que con un poco de disciplina, rigor y trabajo, se les pudo sacar provecho y rendimiento.
Tampoco me puedo olvidar de la gente. Hubo un cambio acá. La gente que fue al Nacional y terminó yendo al Monumental no es la misma que iba a las clasificatorias anteriores. Puede ser que el equipo de Bilesa se convirtió en moda, en objeto de culto, hasta en fetiche y así, la gente que puede pagar los elevadísimos costos de una entrada no está muy acostumbrada a 95 minutos de sufrimiento y pasión. En fin, Chile es uno de los países con mejor asistencia y eso no es poco.
El último párrafo es para la foto. La elegí porque, obvio, Valdivia fue figura y porque está apuntado al cielo. Mientras el 4-2 timbraba los pasajes a Sudáfrica, me acordé de mi tío Eugenio (qué feliz estaría) y también de mi viejo en Puerto Montt. Ellos me llevaron al estadio, me metieron el bichito en el cuerpo y por eso, al momento de las alegrías, el recuerdo es para ellos. A disfrutar se ha dicho, que Chile va al Mundial.
Foto: AP en EmolEtiquetas: Bielsa, Clasificatorias Sudáfrica 2010, Fútbol, Yo