LA FÓRMULA
Published martes, octubre 24, 2006 by Jorge Enrique Díaz Pérez | E-mail this post
Nota en El Mercurio:
El Fórmula Uno se quedó sin TAGCuña de Danilo Núñez: "Nos pareció que era dar un mensaje en el sentido contrario. No estamos en contra de este tipo de exhibiciones. De hecho, las apoyamos, pero no con tan poca preparación y menos en una calle. La organización debe hacer una autocrítica y no echarnos la culpa a nosotros. Santiago no es Mónaco y se debió buscar otro lugar para hacer algo así. El Parque O'Higgins o el aeropuerto, quizás"Cuña de Alejandro Schmauk: "La argumentación que se da apunta a que los habitantes de este país son estúpidos, que no son capaces de diferenciar entre una competencia deportiva, realizada por profesionales, y conducir su auto por las calles de la ciudad. Es como prohibir que haya trapecistas en el circo porque los niños los pueden tomar como ejemplos a la hora de columpiarse. Es poco serio"___
Soy de los que creen que los autos de Fórmula Uno no hacen ruido, sino que emiten música. Por eso me puse contento y manos a la obra apenas supe de la
llegada de uno de ellos, no réplicas de exhibición, al país.
Sin embargo ahora me entero que, al contrario de lo que ha pasado en otros países, la vuelta de exhibición que dará el
Red Bull pilotado por Vitantonio Liuzzi en la
Costanera Norte está en entredicho por culpa de los
últimos accidentes protagonizados por jóvenes conductores.
"No queremos dar una señal equívoca", dice la autoridad. Ok, si estamos con esas, cortemos casi toda la parrilla de TV (sexo, violencia, lenguaje, etc) y así suma y sigue. ¿Por qué echar a perder una fiesta?
Esta es la opinión de un experto en el tema, el ex piloto de Rally Cristián Mackenna: Londres, París, Sao Paulo y muchas otras de las más importantes ciudades del mundo han recibido por sus principales calles y en el centro mismo de ellas a un Fórmula Uno. Es una pena que en Chile existan personas que confundan el impacto positivo del deporte con falta de educación vial, la cual no se mejora cancelando exhibiciones deportivas.
Lo asombroso que es observar a un vehículo de la máxima categoría sólo se puede apreciar a cabalidad con la extensión suficiente y las medidas de seguridad que se han propuesto para el evento de Santiago, que son superiores a las habituales dentro de estas exhibiciones en otras ciudades, donde al público, al estar habituado a estos espectáculos, se les permite colocarse en la vereda.
Es lamentable que un momento tan lindo que se le pretende regalar a la ciudad se cuestione por cosas que no le atañen. Es un hecho que esta falta de cultura deportiva, más de una vez, ha logrado cancelar ideas de este tipo, lo que, sumado a que los pocos recursos destinados al deporte los vemos malgastados, nos dejará destinados a los escasos logros deportivos que sólo hemos obtenido a costa de esfuerzos personales.