SI NO TE VUELVO A VER, FELIZ MUERTE
Published jueves, enero 08, 2009 by Jorge Enrique Díaz Pérez | E-mail this post
Con esas palabras (
Se non ti vedo più, felice morte en rigor),
Hermógenes Pérez de Arce le puso punto final y despedida definitiva a sus clásicas columnas de los días miércoles en El Mercurio.
Según el abogado, su alejamiento se debe a que
me afectó el espectáculo de los otrora más fieros sicambros de la derecha inclinando la cerviz y peleándose por ir a Canossa (léase Tantauco, Caburgua o el Ranco) a dar seguridades de estar quemando lo que ayer adoraron y adorando lo que ayer quemaron, algo que queda mejor explicado en las primeras líneas del párrafo siguiente (
por primera vez en 20 años sólo hay en la arena política contendientes del "No", contrarios a nuestras ideas, un DC y un ex DC). Uf! Fuerte lo suyo.
Lo cierto es que a más de una semana del hecho, las palabras de HPDA suman y suman adherentes y no son pocos (leí de pasada no más los primeros 100 comentarios, una muestra representativa ¿no? Ja!) los que lo postulan como candidato a la presidencia.
Quién sabe en qué quedará todo esto. Seguramente hoy Hermógenes pasea por las carreteras del sur con su Mercedez Benz azul y su mujer de la mano, como quien deja que la levadura haga lo suyo para meter la masa al horno y...
voilá!No sé, yo creo que el tipo no le hacía mal a nadie y como dije más de alguna vez, lo suyo iba por el lado del humor más que por el lado de la actualidad o la verdad histórica como él mismo enarbolaba en sus escritos.
RELACIONADAS: Carlos Peña escribe sobre HPDA: es probable que la salida de Hermógenes -más allá de su sentido estrictamente personal- adquiera además un significado político. Sin esa columna semanal que le servía de estructura de plausibilidad y que miércoles a miércoles confirmaba sus propios sentimientos, ¿qué será de esa parte de la derecha vuelta hacia el pasado, que añora los años perdidos de Pinochet y abjura de Piñera y de todo lo que ha ocurrido luego de 1989?Héctor Soto escribe sobre HPDA: como Fidel Castro y al final como todos los obstinados hijos de la ética de la pura convicción, Hermógenes ha estado viviendo su desencuentro con la modernidad desde el sentimiento de la traición.Rodrigo Ferrari escribe sobre HPDA: La mayoría de las veces se me hacía una cantinela en la que ya no estaba dispuesto a invertir tiempo.
Del baúl de los recuerdos (entrevista en la Revista Tambor -PDF-: El último de los mohicanosFoto: Fundación PinochetEtiquetas: Actualidad, Política