Uf! Leo y leo los nicks de mis amigos y colegas periodistas y todos coinciden en algo: Se pasó el día para movido! Vamos por partes...
La mañana partió con la muerte de Ricardo Claro, destacado empresario y una de las fortunas más acaudaladas del país, el hombre dejó más de dos mil millones de dólares en bienes, los que -por lo que escuché- irán a caer a las manos de su hermano...
Siguió el día y entre rumores de pasillo, cartas y telefonazos que iban y venían, se terminó de confirmar la renuncia de Soledad Barría, la cuestionada ministra de salud a propósito de los casos de SIDA no informados en Iquique y otra de las que estaba en la mira de la Alianza para seguirle los pasos a Provoste (acusación constitucional).
No conforme con ello, aprovechándose del pánico habrá dicho ella (así no me jotean tanto los periodistas) la presidenta de la DC Soledad Alvear también dejó el cargo, dio un paso al costado o como quieran llamarle... Lo claro es que le pasaron la cuenta por la pésima elección municipal, la escapada de los colorines, esto y lo otro...
Camino a casa escucho que a Bonvallet parece que lo habían secuestrado (ya me veía haciendo una nota de última hora en la revista) aunque al final se lo había llevado el señor de la noche. En fin.
Para más remate la Cato perdió un partido que no debió perder. Por lo menos era empate, pero la U pasó apenas de curso y se va a quedar con el Chile 3 como premio a no sé qué, porque de un tiempo a esta parte -y si es por encontrar a un equipo que juegue bien- me quedo con O´Higgins o hasta el mismo Palestino, que con planillas mucho más humildes hacen tanto o más que los azules...
Ah! Y ya que estamos con el fútbol, al otro lado de la cordillera se les ocurrió poner a Maradona en la selección... Si eso no es populismo, que me expliquen de nuevo lo que es. Se pasó Grondona, teniendo tanto talento ahí, al alcance de la mano...
En fin, quién sabe qué más va a pasar de aquí a las 12. Yo me iría con cuidado, uno nunca sabe...
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