¡Ay, Francisco Javier! Tan tranquila que iba la vida, tan esplendoroso que se veía el futuro sentado en el sillón más cómodo de toda la universidad, dejando atrás no sólo ése look hasta nerd que cultivaste con aquellos tremendos anteojos y ésas delgadísimas corbatas, sino -lo más importante- dejando atrás ése pasado oscuro, lleno de agentes de seguridad, de operativos y secretos que, como todo en la vida, tardan, pero aparecen.
Aperecen y justo ahora. Justo ahora que la
UDP iba tan bien, posicionándose como una de las mejores universidades privadas del país, justo ahora que se consolida la expansión y que, entre otros detalles, los jóvenes toman su decisión. Porque -hay que decirlo Umaña- no es bueno o, que es lo mismo, no pudo caer en peor momento esto del asesinato a José Carrasco Tapia, la detención de Ricardo Lagos y tus desafortunadas declaraciones... ¡Ay, Francisco Javier!
¿Cómo es eso de que detuvieron al ahora Presidente para salvarle la vida? A ver, si leo entre líneas, me estás diciendo que a los que no detuvieron no se les quiso salvar la vida y están bien muertos... ¿Eso? Tal vez si hubieran ajusticiado a otro y no a
José Carrasco Tapia les hubiera resultado mejor, pero se equivocaron de persona, se equivocaron de tiempo, se equivocaron de lugar. ¡Ay, Francisco Javier!
Por eso es justo y necesario, justo y necesario, lo que expresaron los hasta el viernes 4 de noviembre 74 académicos de la misma Diego Portales en una
carta abierta. Pedir tu salida del plantel, para evitar el desprestigio, el daño a la imagen, ¡la imagen Francisco Javier, algo tan importante en éstos días como debes saber! es lo más lógico. ¿O no?
Tal vez, era que no, el más ponderado fue
Carlos Peña. Claro, lo tienes a la mano, probablemente hasta deben almorzar juntos y estoy casi seguro de que lo miras como el padre que mira a su hijo para heredarle la empresa familiar. Yo digo familiar, pero Carlos, Carlitos (para evitar la confusión con el Senador de La Rioja), prefiere decir comunidad, pero es lo mismo.
El tema, y es lo que me motivó a postear, es que como dice tu delfín, debatamos esto en comunidad. Soy ex alumno de la Portales y hasta te podría decir que siento orgullo de ello. Es cierto que se pasa mal, pero se pasaría peor con los colores de otra camiseta. En fin. Acojo el llamado del vice rector y así lo demuestro. ¡Debatamos!
Tu propia
carta no me convence mucho, qué quieres que te diga. Me reafirma, mucho más después de escuchar a Pilar Molina en Chilevisión (te acusó de ser su más duro censor en dictadura), tu imagen maquiavélica. Ahí está. Por eso en tu práctica como profesor antes de llegar a la rectoría, uno de tus cursos favoritos era uno sobre
El Príncipe. Pero si hasta en la prensa te entrevistaron con bajo ése título... ¿Fue en la Qué Pasa o en el entonces semanario Siete + Siete? No importa, igual estuvo notable.
¡Ay, Francisco Javier! ¿Qué quieres que te diga? Si estoy por el barrio y veo a los estudiantes frente a la casa central, el palacio Powinka como les gusta recordar, me sumo a la protesta a pedir por tu salida.
¡Ay, Francisco Javier! ¿qué quieres que te diga? Hay algo que no cuadra.
¡UPDATE 14 de noviembre de 2005!: Francisco Javier Cuadra renunció ¡UPDATE!: Francisco Javier Cuadra pide permiso administrativo... y se lo aceptaron BONUS TRACK: Entrevista a Francisco Javier Cuadra en Revista Cosas: “Pinochet no se ajustó plenamente al modelo portaliano”